La diferencia entre endemia, epidemia y pandemia está en que la endemia es cuando la enfermedad aparece en un mismo lugar con alguna periodicidad; la epidemia, cuando la enfermedad afecta en un territorio amplio de manera esporádica; y la pandemia cuando ésta llega a distintas zonas del mundo en una misma época pero distanciada en el tiempo. El Covid 19 es una pandemia.
Por: Roberto Gutiérrez Martínez
Es difícil establecer -con precisión científica- las epidemias que sufrieron los indígenas previo a la llegada de los conquistadores a América; hay sin embargo, información bastante detallada -que nos legaron los cronistas- de la llegada al Nuevo Mundo de algunas de las enfermedades que en varias oportunidades diezmaron la población nativa la que, obviamente, no había desarrollado reacciones inmunológicas. Se sabe de enfermedades endémicas en estos lugares, pero no quedaron suficientemente documentadas; y al no haberse contagiado los conquistadores por ellas es difícil establecer su existencia en la literatura de las crónicas.
De lo que se sabe (por códices), es que los contagios de tifus o tabardillo, (bacteria transmitida por la orina de la rata y por las pulgas), fueron frecuentes antes de la llegada de los conquistadores, especialmente en México, en donde la conocían como Tlatzahuatl (erupción en forma de red); de igual forma llamaron los aztecas a las nuevas epidemias llegadas con los conquistadores, entre ellas la viruela, la que parece ser llegó en el navío de Pánfilo de Narváez, en cuya embarcación venía un marinero africano, contagiado. Aunque plantea duda el que el resto de la tripulación no haya sido documentada como contagiada por esta grave enfermedad.
El paludismo (malaria), es otra enfermedad que existió en México y el norte de Guatemala desde la época precolombina; al igual que la tuberculosis, de la que se ha podido encontrar evidencias en esqueletos de indígenas de épocas anteriores a la conquista.
De la que sí hay prueba documental, y que ocurrió a partir de la llegada de los conquistadores es la disentería, que pudo ser causada por ameba o por bacteria Shigelia. El libro del Chilam Balam de Chumayel describe una espantosa epidemia de disentería, al extremo que al sitio donde se desarrolló dicha epidemia le llamaron Kikil (lugar de ensangrentado). En el Chilam Balam se relata: “Saludables vivían; no había en ellos enfermedad, no había dolor de huesos; no había viruelas (sic); no había dolor de vientre, no había consunción”.
La caída del gran Imperio Maya a finales del siglo VIII se cree pudo haber sido producida por una epidemia de fiebre amarilla -creada por un virus y transmitida por mosquitos- argumento que sostienen algunos arqueólogos a partir de grabados en Quiriguá que asi lo manifiestan.
Otra enfermedad que afectó a los indígenas fue la influenza, que en Europa había generado epidemias terribles desde el siglo XII; se cree que ésta es la enfermedad descrita en el Memorial de Tecpán-Atitlán. Para otros investigadores pudo haber sido mas bien sarampión, viruela o incluso tifus.
Otra de las epidemias graves que sufrieron los indígenas a la llegada de los colonizadores españoles fue la que los indígenas llamaban “cocoliztli” (pestilencia), que se supone mató a varios millones, enfermedad causada por bacteria transmitida por animales que transportaron los colonizadores; aunque también hay historiadores que la atribuyen a una variedad de peste bubónica, causada por la bacteria Yersenia Pestis, transmitida por las moscas.
Una de las epidemias que mas discusiones ha generado es la sífilis y su lugar de origen; hay quienes sostienen que fue originada en América, otros que en Europa. Pero la evidencia científica ha demostrado que ésta es una infección por bacteria, que ha existido desde siempre en todas las sociedades humanas, por lo que le llaman “enfermedad congénita del mundo” y que todas las etnias primitivas la padecieron en mayor o menor grado, y a la que los poetas han denunciado como: “el mal tan querido por Afrodita, y tan odiado por los mortales”. Según todos los estudios serios, la sífilis nació con el hombre, y que por tanto es inútil atribuirlo a Europa, a América, a Africa o cualquier región del mundo. Había sífilis en Europa como también en América antes del “encuentro de estos dos mundos”. Un estudio completo sobre el origen de la sífilis lo escribió el Doctor Carlos Martínez Durán, excelso ex Rector de la USAC.
En la Capital del Reino de Guatemala y sus alrededores se registran las siguientes epidemias: Cólera Morbus en 1520; viruela en 1521; sarampión en 1532 y 1534; “pestilencia” (peste negra) en 1545, 1582, 1592, 1601, 1607 y 8, 1631, 1647, 1660, 1665; viruela nuevamente en 1708, y en 1723-25 y 1733; rabia en 1710 y 1712; tifus (tabardillo) en 1741; sarampión en 1769. En la época Independiente, las mayores crisis de salud han sido provocadas por el Cólera Morbus, (bacteria Vibrio Cholerae) una de las cuales provocó la caída del gobierno del Doctor Mariano Gálvez.
En los últimos años las enfermedades mas comunes en Guatemala han sido el Dengue, el Chikungunya, el Zika, el VIH, la tuberculosis, el paludismo y la hepatitis; pero las que mas muertes causan -además del cáncer y las enfermedades cardiovasculares- las enfermedades respiratorias (neumonía, bronconeumonía) y problemas derivados de la diabetes y la diarrea.
Hasta la llegada del Doctor Juan José Ortega Carrascal a Guatemala a finales del siglo XIX fue que se introdujo en hospitales del país la asepsia y la antisepsia; antes de ello, por desconocimiento de la existencia de microorganismos patógenos, la transmisión de enfermedades fue causante de muchas muertes.
(Fuentes: Enfermedades de los Conquistadores del Dr. Horacio Figueroa Marroquin. Las ciencias médicas en Guatemala del Dr. Carlos Martínez Durán. Memorial de Tecpán-Atitlán del Pbro Teletor. Santiago de Guatemala: historia social y económica 1541-1769 de Christopher Lutz).